domingo, 5 de diciembre de 2010

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Piensa por una vez. No merece la pena que llores. Te ha jodido, de acuerdo, pero no puedes seguir así. Te pasas el día sentada, recordando sin parar, pensando en él. Y él, ahora está con otra, bebiendo, fumando, y sin pensar en ti. Eres idiota tía, te rallas, te comes la cabeza y te vuelves a rallar. Lo peor es que la culpa de todo la tienes tú. Por haber dado nuevas oportunidades, por perdonar y hacer como si nada. Nunca te ha valorado,quizas ya no te valore nadie. Te has convertido en una mierda que con mucha suerte dentro de un largo tiempo alguien querrá, o no, quien sabe. Has perdido el tiempo, sabías donde ibas, y fuiste, metiste la pata hasta el fondo. Querías felicidad, la relación perfecta,y en cambio, ahora estas sola.Ni le tienes a él, ni te tienes tú. ¿No te das cuenta? no eres tú, eres una especie de muñeco con pilas, que se peina, se arregla y se maquilla, porque cree que así podrá ocultar todas sus lágrimas. Pero sabes muy bien, que la gente que te conoce te ve hasta lo invisible. Te miras al espejo,una y otra vez, para asegurarte de que ese que ves es tu reflejo, esas ojeras, ese careto. Estás horrible, no puedes dejar de comer, has engordado, estás gorda. ¿Cual es tu problema? Que no eres feliz, sólo en la forma en la que hablas o en la que miras se nota, y mucha gente te lo dice. ¿Y para que seguir así? Debes mostrarle al mundo que va a tener que ponerse mucho mas hijo de puta si quiere verte hundida.

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