Me desespera ir en un coche que no encuentra sitio para aparcar, dar vueltas y vueltas sobre la misma manzana me marea. Mucha gente odia los atascos, pero sin embargo a mi me gustan, odio las prisas, y los nervios, lo mejor de estar en un atasco, es poner a prueba tu paciencia, a mi me gustan porque estas sentada en el coche, mientras escuchas música, y dejas volar a tu imaginación. Soy el tipo de chicas que sueña con vivir una historia como la de “A tres metros sobre el cielo” y no me avergüenza decirlo. Siempre que me subo en un coche, procuro ponerme detrás. Miro por la ventanilla, escucho música, y me aíslo en mi propia burbuja. Suelo echar vaho con la boca en el cristal, escribir su nombre, y después borrarlo. Quien me conozca bien sabe que soy un poco maniática, y que me encanta escribir. Siempre que me encuentro destrozada solo tengo que abrir el Word y comenzar a escribir uno de estos textos, y poco a poco me siento mejor. El día que de peor manera te hable y que más veces te diga que no me pasa nada y que estoy bien, será el día que mas te necesite a mi lado. No es que sea pesimista, solo soy una optimista realista. Cuando llego a casa no puedo evitar contestar mal a mis padres y a mi hermana, después me arrepiento, pero soy tan tremendamente orgullosa, que no puedo pedir perdón. El orgullo que me sobra en unas situaciones me falta en otras. Soy despistada, alocada, y dentro de lo que cabe buena consejera. Siempre que me necesites estaré ahí, dándote consejos que yo misma debería aplicarme. Me agobio con facilidad, y me cuesta asimilar algo que me hace daño. Me encanta escuchar música en la playa, y escribir mi nombre en la arena. Soy el tipo de persona que protesta y se queja por todo. En ocasiones la boca me pierde, crítico a gente que ni siquiera lo merece, y me muerdo la lengua cuando más tengo que decir. Odio los domingos, aunque me pase la tarde tumbada en la cama y viendo la televisión. Veo la televisión en ocasiones contadas, hay dos series que realmente me gustan, y un solo programa que sigo. Me gusta ir a la academia, porque paso tiempo con mis amigas. Según actúes conmigo, puedes ser todo o no ser nada. Si estoy triste veo películas de amor y como helado. A la hora de estudiar me pongo muy nerviosa si algo no me sale, pero por el contrario si consigo resolver un sistema por el método de Gaus me enorgullezco de mi misma. Me encanta todo lo relacionado con la música, cantar y bailar son mis mayores aficiones. Aun no se ha dado el día en el que me he metido en la ducha y he parado de cantar. Soy alguien fuerte, o al menos intento serlo, puedo caerme mil veces, pero levantarme otras mil, aunque me lleve su tiempo. Los mejores días de la semana son los Lunes y los Miércoles, porque tengo baile, bailando desconecto de todo, y me siento yo misma. Salir los viernes por la tarde y merendar crêpes con mis amigas, es algo que llevo haciendo mucho tiempo y que no lo cambiaría por nada. Me encanta salir de fiesta, desfasarme y al día siguiente recordar todas las barbaridades que he hecho con mis amigas. Salir al balcón en las noches de verano y mirar la luna sentada en la ventana, me hace sentirme plena. Soy muy cotilla, necesito enterarme de todo, y estar en clase sin estar tramando algo con mis amigos, para mí, no es estar en clase. Odio que me vean llorar, lo hago en ocasiones contadas, pero cuando lo hago, es de verdad. Aunque tenga una fachada de tía dura, soy muy sensible, y con cualquier cosa que me digas puedes hundirme para el resto del día. Soy imprevisible, nunca sabrás lo que te espera conmigo, en un momento puedo abrazarte, y al otro no querer ni hablarte. Muchos pueden llamarme la niña “entrada” en un mismo día puedo añadir cinco entradas a tuenti, como al otro, no añadir ninguna. Odio que me salgan granitos, y que el maquillaje no consiga ocultarlos. Me encanta maquillarme los ojos, y siempre que me hecho rimel en las pestañas abro un poco la boca. Estoy enamorada del rimel, siempre me hecho kilos y kilos, y nunca es suficiente. Me gusta atender en las clases de literatura, pero por el contrario las de historia son muy aburridas. Siempre que me siento en mi escritorio miro el cuadro que tengo lleno de fotos. Pero no son solo fotos, son momentos capturados en 10x13 cm de papel de foto que siempre que los miro me hacen sonreír. También tengo guardada en el armario, una caja donde guardo más fotografías, recuerdos de la infancia, y cartas de mis amigas. En mi habitación tengo colgada en la pared una camiseta firmada por la mayoría de personas más importantes de mi vida. Me chifla toda la ropa en general, pero sobretodo los tacones de 13 cm y los vestidos. No puedo acostarme sin desmaquillarme, echarme crema y lavarme los dientes. Por las noches, antes de irme a dormir, miro un cartelito que me regalaron unos amigos que aunque los vea poco les quiero mucho. Miro todas y cada una de las fotos y leo todos los textos (a excepción de uno). Después me tumbo en la cama, escucho música con el mp3 y me quedo mirando el techo hasta que por fin me duermo. Me desespera mirar un reloj y ver como las horas pasan y yo todavía estoy despierta. Me encanta gastar bromas a mis amigos, pero no que se lo tomen a mal, porque nunca lo hago con mala intención. El móvil es mi pequeña adicción, no me importa tener un ladrillo, con tal de que llame y mande mensajes. Me apasionan los gloss de labios y los pintauñas Soy una de las personas mas impuntuales que conocerás en mucho tiempo, y te pediré perdón mientras me invento cualquier escusa para que no descubras el tiempo que invierto en arreglarme. Adoro tener mi cama llena de peluches, ya que todos han tenido algún nombre en la infancia. Me encanta la fotografía, siempre que salgo a algún sitio la cámara me acompaña, me encanta fotografiar todo, desde una puesta de sol bonita, hasta mi cara después de una noche de fiesta. No suelo mentir, pero si lo hago son mentiras piadosas. Me encanta la navidad y todo lo relacionado con ella, tanto poner el árbol, como decorar con guirnaldas toda mi casa.Me gustaría ir a la universidad, y poder conseguir algo relacionado con la escritura. No porque no te diga cada día lo importante que eres para mí, no significa que no lo seas. Puedo estar cinco años sin verte, pero jamás me olvidaré de ti. Adoro los ¿qué tal? en el momento preciso, y que alguien me de las buenas noches me ayuda a conciliar el sueño. Soy soñadora, activa, apasionada, y detallista. No te haré el regalo más caro del mundo, pero te acordarás de él siempre. Coleccionar conchitas es algo que llevo haciendo desde que era pequeña, y siempre que voy a la playa me traigo una. Me gusta la originalidad, y las palabras sencillas, pero profundas. Me conformo con poco, pero necesito un mínimo detalle. Odio la falsedad, los cambios, y las mentiras. O todo es blanco, o es negro, para mí no existen los grises. O me quieres o me odias, la sinceridad lo primero. Soy muy susceptible, con solo ver un grupo de personas mirándome y riendo pienso que están hablando mal de mí. Tengo defectos y los reconozco, en ocasiones me pongo muy pesada, y se que es difícil estar conmigo. Somos adolescentes, y por ello creo que hay que vivir la vida y que equivocarse y recapacitar es de sabios. Tengo un blog en el que intento escribir día a día, pero estudiar para los exámenes, y compaginar academia y baile con tiempo libre es muy complicado, pero siempre que puedo intento sacar un rato libre y añadir una entrada nueva. Si quieres ser mi amigo solo tienes que ser honesto y me tendrás comiendo de la palma de tu mano. Si me necesitas, grita. Aunque algo me duela, con el paso del tiempo agradeceré que haya ocurrido, porque me habrá dado una lección mas sobre la vida. Y hasta la fecha, es todo lo que tengo que decir.